¿Cuáles son las mejores prácticas?
Las mejores prácticas son un conjunto de pautas, éticas o ideas que reflejan la acción más eficaz o prudente para un negocio en particular. Las mejores prácticas pueden ser establecidas por autoridades, como reguladores u órganos de gobierno, o pueden ser determinadas internamente por el equipo de administración de una empresa.
Cómo funcionan las mejores prácticas
Las mejores prácticas sirven como marco general para una variedad de circunstancias. Por ejemplo, en las empresas que producen productos físicos, a los empleados se les puede proporcionar una lista de las mejores prácticas, destacando la forma más efectiva de realizar sus tareas individuales. Una lista de mejores prácticas también puede establecer procedimientos de seguridad para minimizar las lesiones de los empleados.
Para los contadores corporativos, los principios de contabilidad generalmente aceptados (GAAP) son las mejores prácticas que generalmente rigen el nivel de detalle que se alienta a una empresa a revelar en sus estados financieros, para garantizar que los inversores potenciales puedan obtener información útil, análisis y extracción.
Los GAAP también facilitan la comparación cruzada de información financiera entre diferentes empresas dentro del mismo sector, lo que beneficia a los inversores y las empresas en las que invierten, ya que promueve la transparencia. Después de todo, un inversor que compra acciones erróneamente en una empresa podría deshacerse hábilmente de su trabajo, con la más mínima decepción inesperada, lo que podría reducir el precio de la acción.
Los gestores de inversiones pueden seguir las mejores prácticas en el manejo del dinero de los clientes invirtiendo con prudencia en una cartera bien diversificada y respetando las tolerancias de riesgo, los horizontes temporales y los objetivos de jubilación de los clientes.
Consideraciones Especiales
Las “mejores prácticas” es un término que se puede aplicar ampliamente y en una amplia gama de industrias. En el mundo empresarial, la frase se utiliza para todo, desde la gestión de proyectos hasta las funciones de auditoría, para explicar el método más eficaz de realizar una tarea empresarial.
Ahora, con el advenimiento de nuevos sistemas de control de calidad, ha surgido la necesidad de una forma de implementar puntos de referencia medibles y articular formas de implementar rápidamente nuevos estándares de excelencia en una organización identificando problemas, cuantificando sus frecuencias, fomentando soluciones y monitoreando el implementación de esas soluciones para asegurar que resuelvan los problemas centrales en cuestión.
Mejores prácticas como parámetros de la industria
Las mejores prácticas también se pueden utilizar como punto de referencia, donde una empresa puede compartir soluciones viables con otras organizaciones. Por ejemplo, supongamos que una empresa tiene la reputación de ser la mejor infraestructura de distribución de productos galardonada de su clase. Cuando se le pide que describa con precisión las mejores prácticas que llevaron a su hipereficiencia, la compañía revela que coloca marcadores rojos a todo el personal de cumplimiento que pueden usar para indicar sus entregas de mayor prioridad.
Como resultado, todas las órdenes de tinta roja reciben niveles más altos de escrutinio que otras. A medida que más ojos buscan errores cuando ven tinta roja, se pueden mencionar y corregir más errores.
[Important: Although companies share their best practices as a matter of routine, it would be unwise to reveal certain trade secrets that might be easily replicated by the competition.]