¿Qué es la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC)?
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) es un departamento del Tesoro de los Estados Unidos responsable de hacer cumplir las sanciones económicas y comerciales impuestas por los Estados Unidos contra países y grupos de personas.
Se impusieron sanciones a los involucrados en agresiones extranjeras, actividades terroristas y venta de narcóticos, entre otros actos.
La OFAC fue creada en 1950 cuando China entró en la Guerra de Corea. El presidente Harry Truman declaró el evento una emergencia nacional y congeló todos los activos chinos y coreanos sujetos a la jurisdicción de Estados Unidos.
Conclusiones clave
- La OFAC impone sanciones comerciales y económicas de Estados Unidos impuestas a naciones o grupos extranjeros.
- El Congreso puede aprobar o iniciar las sanciones con poderes de emergencia en poder del presidente.
- Las sanciones están destinadas a interrumpir y eliminar la actividad que es perjudicial para los EE. UU. Y sus aliados.
El predecesor de la OFAC fue la Oficina de Control de Fondos Extranjeros (FFC), establecida en 1940 en respuesta a la invasión nazi de Noruega.
Cómo funciona la OFAC
La OFAC impone sanciones impuestas por el gobierno de los Estados Unidos con base en su política exterior y objetivos de seguridad nacional.
Según esta agencia federal, estas políticas están dirigidas a naciones extranjeras, terroristas y narcotraficantes que representan una amenaza para la seguridad nacional o la economía de los EE. UU. Esto incluye entidades que llenan armas de destrucción masiva.
¿Quién autoriza la OFAC?
La legislación del Congreso generalmente autoriza las acciones de la agencia. Sin embargo, el presidente de los Estados Unidos puede usar los poderes de emergencia nacional para tomar ciertas acciones, como congelar activos extranjeros que se encuentran bajo la jurisdicción de los Estados Unidos.
Además, la OFAC impone sanciones basadas en mandatos de las Naciones Unidas. Estos a menudo se hacen en conjunto con las naciones aliadas.Las sanciones y otras políticas comerciales punitivas se utilizan para persuadir a una nación o grupo de que cambie el comportamiento que se considera perjudicial para la comunidad internacional.
Impacto de las sanciones
Las políticas están destinadas a perturbar la economía y la vida cotidiana de las naciones o grupos que violan las normas internacionales. Es una forma de presionar a un país para que se adhiera a estándares aceptables de conducta que no existen en un conflicto armado real.
Por ejemplo, si un grupo terrorista sabe cómo financiar sus actividades vendiendo un artículo en el mercado internacional, podrían introducirse sanciones para interferir con esta fuente de ingresos. Los esfuerzos de la OFAC en este sentido podrían reducir la capacidad del grupo para apoyar el entrenamiento de nuevos reclutas y la adquisición de armas.
Actualmente existe una amenaza de sanciones contra cualquier nación o entidad que busque interferir con las elecciones estadounidenses.
Si un país despreciable invadiera un país vecino, el comercio y otros activos podrían congelarse. La OFAC estaría a cargo de hacer cumplir estas sanciones, lo que podría obligar al país fuerte a detener sus actividades o al menos acordar conversaciones para poner fin al conflicto.
Los programas administrados por la OFAC incluyen sanciones a Irán, Corea del Norte, Cuba, Siria y Rusia.La agencia ha tomado medidas contra personas, como los narcotraficantes, al incautar activos propiedad de delincuentes.
Naciones ahora bajo sanciones
A mediados de 2020, Estados Unidos tenía una larga lista de países sometidos a sanciones estadounidenses, desde los Balcanes hasta Zimbabwe.Otras sanciones se aplican a cualquier nación o grupo que lleve a cabo actividades delictivas específicas, como el ciber-terrorismo y el tráfico de estupefacientes.
Una de las sanciones más famosas se encuentra entre la lista actual de sanciones contra Rusia, ordenadas en respuesta a la invasión rusa de Ucrania que comenzó en 2014.
Otro en la lista es la orden ejecutiva de 2018 que impone sanciones contra cualquier nación extranjera que busque interrumpir las elecciones estadounidenses.